29 de noviembre de 2009

No lo intenten en casa.

Digamos que esto fue pura idea mía, un auto-reto para probar mi capacidad como la pseudo-escritora que considero soy, ya que desde hace días he estado sin inspiración, pasando por esa crisis por la que deben pasar todos los escritores de vez en cuando. Además del hecho que he perdido por completo mi capacidad para usar metáforas. Así que decidí describir una situación, no cualquier situación, sino sexo. Créanme que no es fácil sobre todo por el hecho de que soy más virgen que el aceite de oliva, aunque si fue bastante entretenido. P.D: NO tomen en cuenta el titulo, era para captar sus atenciones, ¡HÁGANLO!


Llega a mi puerta como si lo hiciera por primera vez,
con mirada tímida y traviesa que la oscuridad no puede ocultar y él no puede evitar, y aunque no se da cuenta del rubor de sus mejillas, y yo no las puedo ver, se que están ahí, tal y como la primera vez.

Su paso temeroso y discreto, me recuerda las gotas de lluvia en mi piel,
y me causan la misma sensación, pero se siente aún mejor.

Desnuda a merced de la lluvia, esperando mojarme y sin ninguna razón para dejar de hacerlo.

Lo veo ahora perfectamente hermoso, tal y como la primera vez, cuando mis ojos conocieron el significado del amor.

Cada vez más cerca de mi, y "Hola" es al parecer lo único que puede decir, tal y como la primera vez.

Mis labios, solo desean los suyos, y no son capaces de formular palabras, son analfabetos, solo quieren besar.

Lo toco y me toca, nos tocamos. Y nuestras pieles ahora son solo una.
Mi aposento ahora es suyo también.

Delicado y suavemente sosteniendo mi cabeza, mirándome con sus ojos color fuego, cara a cara, aún mas cerca; siento su respiración, que me quema, me hace aún más adicta a él, mucho más.
 
Lo puedo oler y saborear, y ahora lo deseo más. Saboreando su olor a gloria, me doy cuenta que su pecho -tan cerca del desnudo mio- está a punto de explotar, suena a amor en su mayor exponencia.

Punzante y cortante, hasta el corazón acelerado, tal y como la primera vez.

Suspira, y eso es suficiente para mi, no necesito palabras.


Por un segundo pierdo el control, y en el otro sus labios rozan lo míos tímidamente, tal y como si fuera la primera vez.



La timidez duró muy poco, la lluvia comenzaba a mojar, su lengua persiguiendo la mía, como juegos de niños pero sin tanta inocencia.

Sus labios tan suaves como los recordaba, empiezan a jugar con mi cuerpo, arriba y abajo, cuello, y aún más abajo.

En un momento de claridad notamos que su ropa está de más, la comienza a quitar y mi respiración se hace más fuerte; un gemido es suficiente para distraerlo, y sus labios regresan a mi, como si de años se tratara la última vez que lo hicieron.
Somos uno solo ahora mismo, piel con piel, ganas y soledad.

¡Soledad de dos!


Otra vez frente a frente conmigo, siento todo lo que una vez soñé y lo deseo ahora más que la primera vez.

La lluvia ha llegado de nuevo.

Y finalmente sus ansias entierran las mías, y mis manos barren su espalda, sin intención de soltarla, y lo hace de nuevo, y lo vuelve a hacer. Y de nuevo recuerdo los juegos de niños.

Subir al cielo y bajar de nuevo.

El dolor no puede lastimarme, el dolor solo me enseña.

Sostiene mi espalda y me une a su pecho, no es posible estar más cerca, siento un espasmo al tocarlo, tal y como la primera vez.
 
Sus labios comienzan a regresar a los míos, haciendo varias paradas tímidamente me besa, tal y como la primera vez, me abraza, suspira, sonríe.

Y recuerdo todos nuestros momentos, recuerdo que tengo uno nuevo que recordar,

nuestra primera vez.

27 de noviembre de 2009

Metas para el 2010

Ya huele a navidad, y como tengo por costumbre suelo hacer mis metas para el próximo año. Siempre he creído que me da un poco más de ganas cumplirlas si me persiguen estando plasmadas en papel, o en este caso blog.


Mis metas:


Lectura:


-Terminar la Saga Morganville


-Leer mi libro del manual del guerrero diariamente


-Leer The Host


-Terminar las historias Noches de Baile en el infierno


-Leer a Becquer


-Leer a Henry Miller

 
-Leer a George Sand

 
-Leer a Mary Shelley

 
-Leer a George Gordon


-Leer a José Saramago


-Leer a Jane Austen


Otras:



-Mejorar en guitarra


-Mejorar mis notas

13 de octubre de 2009

Error

El principio de este cuento de terror,
un cuento que marcó mi corazón;
que estaba lleno de amor y ahora sólo conoce el dolor.
Este cuento del que tú y yo fuimos protagonistas,
el error más erróneo.
El cuento sin final feliz.